Me había prometido no escribir de nuevo antes de tener respuestas, quería saber a ciencia cierta, tener todas las respuestas antes de dar el paso de dar por sentado todo lo que vendrá, pero uno no conoce el futuro, lo que si es cierto es que siempre he creído que escrito estaba, que pase lo que pase, así debía ser.
En setiembre del año pasado fui diagnosticada por el mismo mal que a mi edad, molió a golpes a mi mamá y he estado muriendo un poco cada día sabiendo que dentro de mi, se extendía el dolor que amenazaba con apagar mi luz. Pero mi paz interior y el humor muy negro que vino implícito en mi desde que nací, han sido suficientes para aceptar el hobby que Dios tiene conmigo, siempre lo más difícil para Rambo y lo que le sigue, para mi.
Mucho se esperaba, que yo terminara con la piel en los huesos, que me hubiera arrancado las uñas y el cabello, que muriera y se notara, pero yo nunca he estado de acuerdo en perder batallas importantes, jamas he querido ser una perdedora... no permití que esto se viera, mi sonrisa se mantuvo, mis bromas locas, mis ganas de bailar, de ser feliz, de amar, no he permitido que me quiten las ganas de comer, uno no sabe cuando puede ser la ultima vez que va a probar algo y hay que aprovechar mientras se pueda, pero no siempre se puede mantener la compostura a veces suceden cosas que nos hacen perder el equilibrio que creemos tener y nos derrumbamos sin que ni para que, de un día para otro, sin previo aviso y nadie pudo haberlo visto venir, nadie sabe como te sentís y solo tenes ganas de llorar y de maldecir la hora en que el mal vino a tu vida... y nadie entiende que todo es parte del proceso.
Pero lo que si es cierto es que todas las acciones están encaminadas a un mismo fin, todo lo que sucede alrededor suma más a la causa y aunque no queramos las pequeñas cosas nos afectan y nos hunden, porque no es fácil vivir con una bomba de tiempo dentro, pero nadie entiende porque solo es uno quien esta enfermo y por mas que los demás nos quieran jamas van a entender lo que eso significa, porque solo nosotros sabemos que nuestro proceso no tiene curas mágicas, no hay medicina milagrosa, no existe remedio natural para lo que te esta destruyendo y lo único con lo que cuentas es con la actitud positiva y llega el momento en que ya ni eso se puede mantener.
El proceso llega al fin de aceptar que tu vida va a cambiar, que podes sobrevivir pero que nunca mas vas a volver a ser la misma. El proceso llega al punto de saber, que de todos los que te rodeaban hoy solo quedan unos cuantos, que incluso quienes decían amarte no soportaron lo que implicaba ser parte de tu vida en un momento tan duro, que muchos se confiaron de verte feliz todo el tiempo y que al final, al ver la cara real de como te sentías, dieron dos pasos atrás.
Lo cierto es que el proceso es duro, pero estando en el, no queda más que finalizarlo.
En setiembre del año pasado fui diagnosticada por el mismo mal que a mi edad, molió a golpes a mi mamá y he estado muriendo un poco cada día sabiendo que dentro de mi, se extendía el dolor que amenazaba con apagar mi luz. Pero mi paz interior y el humor muy negro que vino implícito en mi desde que nací, han sido suficientes para aceptar el hobby que Dios tiene conmigo, siempre lo más difícil para Rambo y lo que le sigue, para mi.
Mucho se esperaba, que yo terminara con la piel en los huesos, que me hubiera arrancado las uñas y el cabello, que muriera y se notara, pero yo nunca he estado de acuerdo en perder batallas importantes, jamas he querido ser una perdedora... no permití que esto se viera, mi sonrisa se mantuvo, mis bromas locas, mis ganas de bailar, de ser feliz, de amar, no he permitido que me quiten las ganas de comer, uno no sabe cuando puede ser la ultima vez que va a probar algo y hay que aprovechar mientras se pueda, pero no siempre se puede mantener la compostura a veces suceden cosas que nos hacen perder el equilibrio que creemos tener y nos derrumbamos sin que ni para que, de un día para otro, sin previo aviso y nadie pudo haberlo visto venir, nadie sabe como te sentís y solo tenes ganas de llorar y de maldecir la hora en que el mal vino a tu vida... y nadie entiende que todo es parte del proceso.
Pero lo que si es cierto es que todas las acciones están encaminadas a un mismo fin, todo lo que sucede alrededor suma más a la causa y aunque no queramos las pequeñas cosas nos afectan y nos hunden, porque no es fácil vivir con una bomba de tiempo dentro, pero nadie entiende porque solo es uno quien esta enfermo y por mas que los demás nos quieran jamas van a entender lo que eso significa, porque solo nosotros sabemos que nuestro proceso no tiene curas mágicas, no hay medicina milagrosa, no existe remedio natural para lo que te esta destruyendo y lo único con lo que cuentas es con la actitud positiva y llega el momento en que ya ni eso se puede mantener.
El proceso llega al fin de aceptar que tu vida va a cambiar, que podes sobrevivir pero que nunca mas vas a volver a ser la misma. El proceso llega al punto de saber, que de todos los que te rodeaban hoy solo quedan unos cuantos, que incluso quienes decían amarte no soportaron lo que implicaba ser parte de tu vida en un momento tan duro, que muchos se confiaron de verte feliz todo el tiempo y que al final, al ver la cara real de como te sentías, dieron dos pasos atrás.
Lo cierto es que el proceso es duro, pero estando en el, no queda más que finalizarlo.
Comentarios