"La vida es de decisión" decía una ronca y seria voz, que presagiaba el castigo venidero a la pequeña señorita, esta voz no era ni más ni menos que su amoroso y obstinado padre, que la veía con ojos diferentes, desafiantes, arrogantes "esto será en tu vida, siempre una lección" repetía incansablemente el hombre mientras esperaba la respuesta de la joven damisela, respuesta que jamas llegó pero que se esperaría de ella, siendo que no tenía de cinco años nada más... al cabo y al fin.
Tengo casi 25 años y aun me cuesta decidir, que canción escuchar para un momento especial, que comer o si quiero viajar, la mayoría de veces no se que pensar, que decir o como actuar, jamas creí, que casi 20 años después las palabras de mi papá iban a tener tanto meollo en mi.
En ese momento de mi infancia (medio extraña debo admitir) no se trataba mas que del sabor de un helado, simple decisión que casi dos décadas después aun me cuesta aceptar que me ha mostrado que en la vida es mas que si y no, pero que o se mueve o no, se dice o no, se hace o no, todo es una maldita decisión.
Desde que amanece, decido si vivo o no. Uso este traje o no. Como o no. Cambio mi vida hoy o no. Recorro el mundo o no. Y parece que en mi acceso gris o es un cosa o no (la verdad no sé, decidir no es lo mio ni siquiera hoy).
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